Naci y crecí en la ciudad de lima , y desde siempre estuve acostumbrado a ver el cielo limeño como un colchón de espuma gris sobre mi cabeza , hasta 1987 cuando viaje a Cajamarca , una hermosa ciudad al norte del Perú , no solo me impacto el olor a eucaliptos y un paisaje de ensueño , sino que pude comprobar que lo que decían mis libros era cierto el cielo era azul , rodeado de nubes blanquísimas como si fueran barcos blancos en un océano interminable , ahora pienso ¿ que paso en lima? , será que no hay cielo azul ahí y la respuesta es que todo lo azul esta ahí también, solamente hay que ir más arriba que las nubes grises ,pienso que dentro de cada uno hay muchas nubes grises que conforme pasan los años se hacen mas grandes , la única manera de ver lo azul dentro de nosotros es ir mas arriba y eso solo se hace poniendo la mirada en el cielo ,en Dios , es el único que puede hacer que tu alma pase de gris a un azul perfecto y muy pronto podrás decir , muy dentro de ti mismo , era verdad el cielo era azul.
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